1. No encontramos palabras para expresar los sentimientos de dolor e indignación ante la masacre cometida el viernes 24 de junio por la policía marroquí en el puesto fronterizo de la valla de Melilla, entre España y Marruecos, donde han sido asesinados al menos 37 inmigrantes del África negra en su intento de llegar a Europa.
2. Nos duele el alma al contemplar segadas las esperanzas de una vida digna de hombres y mujeres que huyen de la violencia y del hambre en sus países de origen. No podemos callar ante las políticas migratorias de Marruecos, y sobre todo de la Unión Europea y de España, que a través de FRONTEX ofrecen grandes sumas de dinero al gobierno de Marruecos para que impida el paso de migrantes hacia Europa. Denunciamos que las autoridades europeas consideren a los africanos negros como personas de segunda categoría mientras abren las puertas a otros migrantes y refugiados porque son blancos.
3. Denunciamos y condenamos la actitud de la Unión Europea y del presidente del Gobierno español Pedro Sánchez cuando señalan como responsables de la masacre a las mafias, sin ofrecer canales seguros y humanitarios a las personas y colectivos humanos que buscan refugio en España y Europa. Lamentamos que no se haya expresado una palabra de condolencia a las familias de las víctimas.
4. Denunciamos las declaraciones del gobierno español felicitando a Marruecos por su cooperación en la lucha contra la inmigración ilegal ante el intento masivo de las personas inmigrantes de saltar la valla de la frontera entre Marruecos y Melilla. Tal actitud puede convertirle en cómplice de las muertes de las personas migrantes y solicitantes de asilo.
5. Exigimos, al igual que lo han hecho otras entidades, una investigación urgente, rigurosa y exhaustiva a los gobiernos de España y Marruecos sobre su actuación en estos lamentables hechos, tanto de la represión y las muertes de 37 personas migrantes como de las devoluciones en caliente, que han vuelto a repetirse en Melilla y en Ceuta tras las reiteradas condenas de las organizaciones internacionales en favor del derecho al asilo.
6. Denunciamos el pacto antiinmigratorio entre España y Marruecos, convirtiendo a Melilla y Ceuta en un cementerio para quienes tratan de huir de las guerras y la miseria.
7. Criticamos a aquellos medios de comunicación que desvían la atención de la opinión pública poniendo el énfasis en las actuaciones violentas que puedan haberse producido por parte de algunos migrantes y refugiados sin entrar en las causas profundas que provocan su desesperación.
8. Como señala la comisión española de Justicia y Paz, no debe obviarse que la guerra, el hambre y las persecuciones están detrás de todas y cada una de las historias de las personas que salen de sus países. Tampoco debe obviarse que todos los países de la Unión Europea son signatarios de la Convención de Ginebra sobre el estatuto de los refugiados que obliga a los estados miembros a proporcionar protección a aquellas personas "que debido a fundados temores de ser perseguidas por motivos de raza, religión, nacionalidad, pertenencia a determinado grupo social u opiniones políticas, se encuentre fuera del país de su nacionalidad y no puedan o, a causa de dichos temores, no quieran acogerse a la protección de su país".
9. Exigimos que, en cumplimiento de los tratados internacionales, se dé prioridad a la protección, seguridad y acogida de las personas y colectivos migrantes, refugiados y desplazados. Que no se haga discriminación entre las personas refugiadas. Que a todas se las acoja aplicando el derecho internacional y humanitario.
10.Concluimos con las palabras del papa Francisco en su encíclica Fratelli Tutti, sobre la fraternidad: “Frente a las diversas y actuales formas de eliminar o de ignorar a los que huyen del hambre o la guerra, seamos capaces de reaccionar con un nuevo sueño de fraternidad y de amistad social que no se quede en palabras”. Con la esperanza de que todos hagamos lo posible para reconstruir esta sociedad rota por la codicia del poder y del dinero, les enviamos un fraternal saludo comprometido con la justicia, la paz y la vida.
27 de junio 2022