Se encuentra usted aquí
Solidaridad con religiosas de EE.UU
CARTA SOLIDARIA CON LA “CONFERENCIA DE RELIGIOSAS DE LOS ESTADOS UNIDOS” (LCWR) ANTE LA EVALUACION DOCTRINAL DE LA CONGREGACION PARA LA DOCTRINA DE LA FE DE LA SANTA SEDE
Estimadas Hermanas de la Conferencia de Religiosas de los Estados Unidos (Leadership Conference of Women Religious (LCWR), por este medio, el Servicio de Solidaridad Cristiana con los Pueblos de América Latina (SICSAL) quiere expresar su profunda solidaridad y sentimientos de aliento a todas ustedes que han dado testimonio de fidelidad evangélica, en el seguimiento de Cristo.
SICSAL es una Red Internacional con presencia en cinco Continentes y, durante más de treinta años de existencia, ha constatado el servicio de tantas hermanas religiosas originarias de los Estados Unidos, algunas de ellas dando la mayor prueba de amor que se puede dar: entregar la vida por los demás; basta citar los casos de la Hermana Dorothy Stang (asesinada en Brasil) y de las Hermanas Dorothy Kazel (Ursulina), Ita Katherine Ford (Maryknoll), Maura Clarke (Maryknoll) y Jean Donova (Laica Misionera) asesinadas en El Salvador.
Por esos y por tantos otros testimonios -casi siempre silenciosos y dentro de la sencillez evangélica-, sabemos que sus vidas han dado “frutos buenos y abundantes” garantía de la autenticidad de sus personas, de su fidelidad al Evangelio y a la Iglesia.
Por su cercanía, por su acompañamiento al pueblo de Dios, especialmente, a los más pobres, queremos manifestar nuestro agradecimiento a todas Ustedes. Estamos seguros que, en estas difíciles circunstancias, sabrán hacer un discernimiento profundo y evangélico, las animamos a mantenerse firmes en sus opciones de fe y en su reflexión teológica.
Apoyamos totalmente su comunicado (01 Junio 2012) y, junto a Ustedes ratificamos que, “en este tiempo en el que la Iglesia y la sociedad enfrentan gran conmoción, la Junta considera que es imperativo que estos temas sean tratados por toda la comunidad de la Iglesia en un ambiente de apertura, honestidad e integridad”.
Cuenten con nuestras oraciones y cercanía espiritual.
La Iglesia sirve en cada país para hacer de su propia historia, una historia de salvación. La Iglesia no es extranjera en ningún país. Si es
cierto que vienen agentes de pastoral... que mueren en El Salvador, religiosas que dejan la ternura de sus hogares y de su patria, para
venir a trabajar con nosotros, esto significa la universalidad de este mensaje que santifica todos los pueblos...
Saludamos desde aquí a esas heroicas Hermanas que están trabajando en pueblos tan distantes, pero con tanto fruto.
¡Que el Señor las bendiga!
[Mons. Romero, 11/Dic./77]
11 de Junio de 2012
Armando Márquez Ochoa.
Secretario.
- Inicie sesión para comentar